Recuerdos del colegio (VII)

Durante los veraneos que pasamos en Segovia solíamos hacer de vez en cuando alguna excursiones a distintos lugares de la provincia , siempre cercanos a nuestro lugar de residencia que no era otro que un grupo escolar que durante el verano nos servia de morada, este centro tenias pot nombre Grupo Escolar Primo de Rivera y se encontraba situado en el paseo de Los Colmenares bastante cercano a la estación del ferrocarril y de una fqabrica de licores y turrones en la cual se elaboraba el Anís de la Castellana , para nuestra permanencia en este lugar se hicieron unas hamacas o camas de madera y lona siendo los dormitorios las aulas de dicho centro escolar que habían sido habilitadas para este fin pese a estas cosas el lugar era bastante cómodo pues no estqngo en el centro de la ciudad si lo estabas lo bastante cerca como poder desplazarnos al mismo en pocos minutos el paseo de Los Colmenares era un lugar de poco transito y bastante bien protegido del sol por la sombra de unos hermosos olmos a la derecha de la calle o paseo había una colonia de chales que componían la colonia del General Varela que eran viviendas otorgadas por el gobierno de Franco a familia que habían tenido algún muerto durante la guerra civil , tenían todas ellas un pequeño jardín delante de las mismas y detrás de las misma un terreno apto para ner un pequeño huerto y algunos animales , siguiendo el paseo hacia la estación y en la acera izquierda del mismo había un taller y alquiles de bicicletas que como ya he mencionado en capítulos anteriores era propietario del mismo y hombre muy amable .

Recuerdo que una de las excursiones que hicimos fue a una finca situada a unos kilómetros de la capital y que era un centro siquiatrico llamado de la Virgen de la Fuencisla mas conocido por quita pesares era este hospìtal un edificio muy bien construido y estaba situado en una finca de grandes dimensiones en lo que había campos de trigo frutales huertas con toda claee de hortaliza y también una especie de pequeño bosque con encinas y pinos por los que corrían conejos a los que en varías ocasiones intentamos cazar lo que no nos fue posible hacerlo , aquel fue un día bastante ameno y nos divertimos muchísimo, recuerdo que pasamos al pabellón donde había una mujer enferma que nos dio unos vasos de leche de las vacas que tenían , esta señora era de un gran simpatía pese a ser una persona desequilibrada , estando bromeando con nosotros entro en la dependencia unos de los auxiliares creo que fue don Antonio Casas y ella al verlo se dirigio a él y le dijo levantando el puño cerrado “salud camarada”, a lo que este sin inmutarse contesto al saludo de la mima forma , luego se justifico diciéndonos l estar ella loca contesto así pra evitar problemas

Para i fue este un dí de l+los que mejor lo pase , una de las monjas que regentaban este establecimiento era Sor Carmen que años antes había estado destinada en nuestro colegio